Another code: Two Memories

Another Code: Two Memories

INTRODUCCIÓN

Mucha gente afirma que la plataforma idónea para jugar con videojuegos son las consolas, pero en el apartado de las aventuras gráficas éstas nunca han sido muy prolíficas, que es un género con el cual las compañías no se han atrevido demasiado debido el gran parte a la ausencia del ratón.

Realmente jugar a juegos de este tipo con un pad produce una sensación mucho más pesada e incómoda que la que podemos experimentar en el ordenador. Esa es la misma razón por la que los juegos de estrategia no alcanzan un gran éxito cuando saltan del PC a la videoconsola.

Pero gracias a Nintendo DS y a sus particulares funciones podemos disfrutar de las mismas posibilidades que en el ordenador e incluso mayores, la pantalla táctil y el Stylus permiten a la portátil competir con el ratón, mientras que su micrófono permite idear nuevas formas de juego. Ambos componentes, así como el uso de la doble pantalla se conjugan en el juego que nos ocupa; Another Code: las dos memorias (conocido como “Anaza Kodo: Futatsu no Kioku” en Japón).

Another Code narra la historia de Ashley, una niña que está a punto de cumplir 14 años y que ha vivido desde que tiene uso de razón con su tía Jessica. Tiene un sueño relacionado con su pasado que le atormenta cada noche. En él aparece ella con 3 años durmiendo en un lugar oscuro. De repente se abre la puerta y alguien la llama por su nombre, pero cuando va a verle el rostro siempre se despierta sin recordar nada más. Ashley apenas conoció a sus padres. Sólo sabe lo que le ha dicho su tía: que murieron en un accidente cuando era pequeña.

Sin embargo el día de su decimocuarto cumpleaños Ashley recibe un paquete. Éste contiene un aparato electrónico llamado DAS (idéntico a una Nintendo DS) junto a una carta de su padre en la que lamenta no poder estar con ella y en la que le pide que acuda a una isla llamada Blood Edward para reunirse con él y explicarle todo. Extrañada de leer esto habla con su tía Jessica, y ambas se embarcan hacia la isla, pero al llegar allí el padre de Ashley no está. Jessica se va a buscarle mientras la niña espera junto al barco, pero al cabo de un rato su tía no vuelve y ella decide ir por su cuenta a explorar la zona.

Al llegar a un cementerio situado junto a una gran mansión conocerá a D; un fantasma de aspecto amigable que no recuerda nada de su pasado. Ashley y D entrarán en la mansión en busca de las respuestas que necesitan para comprender qué está ocurriendo y saber por qué están en esa isla.

Ante este misterio no nos queda más remedio que coger nuestra consola y sumergirnos en una entretenida aventura con tintes de película de miedo pero con un tono amable apto para todas las edades.

GRÁFICOS

En Another Code vamos a encontrarnos un apartado gráfico de gran calidad con unos entornos bien detallados y con una gran ambientación. Para el juego usaremos las dos pantallas de nuestra Nintendo DS. En la de abajo; la táctil, es donde nosotros jugaremos la aventura, donde manejaremos al personaje y donde solucionaremos los problemas que se planteen, dejando la de arriba para mostrar escenarios y para las secuencias que nos cuentan la historia.

La acción o el juego propiamente dicho se desarrolla en perspectiva cenital al contrario que las aventuras gráficas clásicas. Esto tienes sus pros y sus contras. En el apartado de ventajas, la cámara permite observar mejor los escenarios y tener una visión más amplia de lo que hay a nuestro alrededor. De este modo el manejo del personaje es más cómodo mediante el stylus ya que podemos dirigir a Ashley con facilidad. Sin embargo en ocasiones echaremos de menos una función que nos permitiese mover la cámara y girarla, ya que el poder ver la acción únicamente desde arriba no nos deja contemplar los gráficos del juego como nos gustaría.

Another Code está realizado en tres dimensiones salvo ciertas escenas de las que hablaremos más adelante, pero como acabamos de decir, la perspectiva cenital hace que este hecho pase bastante desapercibido. No obstante gracias a algunos giros que hace la cámara en momentos puntuales, como la llegada del barco a la isla, o al realizar ciertos descubrimientos, podemos apreciar una buena calidad en los modelados y una cantidad de polígonos bastante aceptable. La verdad es que si hablamos de las localizaciones y de todo el entorno que rodea la aventura nos encontraremos con unos gráficos en algunos momentos geniales.

Eso sí, a veces hay extraños contrastes, sobre todo en cuanto a las texturas, puesto que podemos encontrarnos desde puentes, lápidas o muebles que parece que pudiéramos tocar, hasta exteriores en los que la hierba muestra una pixelación demasiado acusada y que por tanto denotan un esfuerzo menor. De todos modos estos casos son poco frecuentes y podemos afirmar que detrás de Another Code hay un gran trabajo en cuanto a la realización de escenarios.

Los personajes sin embargo están un poco menos cuidados debido a que los programadores no se han querido esforzar demasiado en recrear unos detalles que casi no se van a ver en pantalla. De tal modo, del personaje de Ashley que vamos a manejar nosotros sólo veremos su cabello, brazos y piernas. Sus animaciones además son mínimas, puesto que a la Ashley poligonal sólo la veremos correr o estar parada. Ni la veremos abrir puertas, ni encender una luz ni mucho menos expresar emociones. Todo eso se dejará para la pantalla superior.

Y es que es en dicha pantalla en la que la historia cobrará vida. Mientras estemos manejando al personaje por el escenario con el stylus podremos levantar la cabeza para ver una imagen pre-renderizada del paisaje que está viendo Ashley en ese momento.

Estas imágenes son de gran calidad pero carecen de dinamismo, y al igual que todo el juego son de estética claramente japonesa, lo cual gustará a buen seguro a los seguidores del manga y el anime. Tanto la intro como las escenas que desarrollan la trama están echas del mismo modo, e igualmente son estáticas. Por lo tanto se nos contará la historia mediante una sucesión de imágenes, ya que no hay secuencias de video. En éstas es donde podremos conocer más a Ashley, y donde veremos su forma de ser y de actuar según qué situaciones, porque como dijimos antes, su modelo tridimensional no expresa absolutamente nada. Ciertamente hay gran variedad de dibujos para los personajes y todos muestran una gran calidad artística. En ese aspecto será como ver una novela gráfica.

SONIDO

La mayor parte de las melodías de Another Code las escucharemos mientras estamos investigando. Por lo general acompañan bastante bien y le dan un tono de misterio a nuestras búsquedas, pero realmente tampoco consiguen crear situación de tensión ni llegan a enganchar porque en realidad tampoco es su cometido. Simplemente están para mantener el ritmo constante y sin sobresaltos que existe cuando estemos recorriendo los escenarios en busca de pistas. Eso sí; son algo repetitivas. Sin embargo, en los momentos en que conozcamos a algún nuevo personaje o hagamos un descubrimiento se dará paso a unas músicas más rítmicas que nos conseguirán transmitir cierta alegría por el logro realizado.

Realmente la banda sonora de Another Code mejora mucho en las secuencias que desarrollan el argumento, ya que se acoplan muy bien a cada momento dependiendo de la emoción que esa escena exprese: y es que no oiremos las mismas notas cuando encontramos la solución a un puzzle que cuando D nos hable de una persona del pasado ya fallecida.

En cuanto a los efectos de sonido poco hay que decir aquí. Lo primero que debemos recalcar es que el juego no tiene voces; todos los diálogos suceden mediante textos en pantalla (en castellano). Esto era previsible teniendo en cuanto las limitaciones de almacenamiento de las tarjetas de Nintendo DS. De todos modos tampoco se echan en falta en ningún momento.

El resto de los sonidos que escucharemos están bien conseguidos, aunque no son muy abundantes. Se reducirán al sonido del mar en los inicios del juego, las pisadas de Ashley y el movimiento de ciertos objetos. Tampoco se puede pedir más en este aspecto, ya que la aventura transcurre en localizaciones presuntamente silenciosas, como son la mansión de la isla de Blood Edward y sus exteriores.

JUGABILIDAD

Es sin duda el apartado que más destaca del juego. Lo primero de todo es decir que os lo podéis terminar sin tocar para nada los botones de la consola. Todas las acciones se llevan a cabo mediante el Stylus y el Micrófono. Es posible que penséis que un control tan reducido le puede restar posibilidades al título. En ese caso simplemente os equivocáis.

El procedimiento de juego es el siguiente: manejamos a Ashley en la pantalla inferior mientras que en la superior se nos mostrarán los escenarios que ella está viendo. En el momento en que uno de esos lugares pueda ser explorado se iluminará el icono que tenemos en la parte derecha con una lupa dibujada. Tocamos dicho botón y en ese momento el escenario que estábamos viendo pasará a nuestra pantalla táctil. Ahí podremos investigarlo a fondo tocando dos veces con nuestro lápiz todo aquello que nos llame la atención. Sí es algo con un mínimo de relevancia, Ashley hará un comentario al respecto, si es un personaje podremos hablar con él, y si es algo con lo que podamos interactuar se nos abrirá una especie de minijuego que deberemos superar para seguir adelante. Así dicho suena algo insulso, pero os aseguro que estamos ante lo mejor del juego sin duda alguna.

¡Y es que en este punto las posibilidades con infinitas!: girar una rueda con el Stylus para bajar un puente, soplar en el micrófono para quitar el polvo de un viejo cuadro, lanzar un objeto para tirar una caja sobre una estantería etc etc. No os podemos decir más para no destriparos el juego, pero de verdad; habrá veces que os sorprenda la originalidad e inteligencia con la que los programadores han resuelto las situaciones que se plantean. Va a haber momentos incluso en los que lo que muestra la pantalla superior tendrá algo que ver con lo que aparece en la inferior. ¿Las relaciones entre ambas? Tendréis que descubrirlas vosotros mismos. Realmente las sensaciones que ofrece Another Code en este punto no son equiparables a las que os haya podido transmitir otra aventura gráfica.

Además del icono de la lupa tendremos en todo momento disponible el DAS, artilugio con el cual podremos hacer fotos, usar los objetos que encontremos o salvar la partida. Por cierto, estad atentos a esa función de fotografiar, que quizá os sea útil en algún momento.

En cuanto a la dificultad, está muy bien ajustada y es creciente. Al principio no os costará demasiado terminar los dos primeros capítulos (el juego se divide en siete, aunque el último simplemente cuenta el final), pero cuando estéis por el tercero comenzarán los atascos, los quebraderos de cabeza y el típico “¿qué hago yo ahora?”. Y es que al igual que en cualquier otro juego del género existirán puzzles para los que no se consigue hallar la solución o misterios que no sabremos resolver. De todas formas todo está realizado con mucha lógica y pensando bien se consigue dar con la clave. No habrá por tanto nada absurdo; todo tiene sentido. Eso sí, quizá tengáis que echar mano de alguna guía. Dependerá de lo avispados que seáis.

DIVERSIÓN

Como se dice comúnmente, el juego engancha. Una vez hayamos llegado a la isla, hayamos conocido a D y consigamos entrar en la mansión no podremos parar hasta descubrir la verdad que hay detrás del asunto. Lo único que se puede decir en su contra es que la historia, a pesar de estar muy bien contada, no contiene ninguna sorpresa de gran relevancia, ya que todo es bastante predecible. Además el juego no es muy largo; os lo terminaréis en unas 6 horas u 8 horas dependiendo del tiempo que perdáis resolviendo los múltiples problemas que encontraremos. Eso sí; cuando os lo hayáis terminado probablemente queráis volverlo a jugar porque el argumento tiene bastantes matices que se nos escaparán la primera vez y con los que después entenderemos más cosas.

Pero como ya hemos dicho lo mejor son los puzzles, de los más originales, y entretenidos que hayáis visto en mucho tiempo. Eso sí, lo malo vendrá cuando os quedéis atascados y tengáis que dar vueltas y vueltas varias veces por el mismo sitio.

CONCLUSIÓN

Cualquier género dentro de una consola de Nintendo suele ser siempre sinónimo de originalidad, y en este caso Cing ha sabido cumplir con las expectativas de los que esperaban ver una buena aventura gráfica en su DS. Another Code es un juego bástante bueno técnicamente con unos escenarios bastante bien diseñados y con una ambientación conseguida. Seguir a Ashley en la búsqueda de su padre por la isla de Blood Edward es un placer al igual que descubrir junto a ella la historia de D. A los aficionados de los juegos clásicos del género quizá les resulta extraña la propuesta de contar la historia a doble pantalla y que el personaje al que manejan carezca de dinamismo. De todos modos el resultado en ese aspecto es bastante bueno, y una vez que se acostumbren a él les resultará original y muy completo.

Lo que todos los usuarios disfrutarán sin duda es de sus magníficos puzzles y de las infinitas maneras que los programadores han ideado para resolverlos haciendo uso de las funciones exclusivas de Nintendo DS. Pocas veces se ha visto una aventura en la que se pueda participar de un modo tan activo. Os sentiréis parte de la misma, lo cual sabemos que es un tópico muy utilizado pero es que es completamente cierto.

En definitiva, por una historia bien contada, por unos gráficos vistosos y sobre todo por su gran, gran originalidad, Another Code es un juego que se hará un hueco en vuestra memoria.

A FAVOR Y EN CONTRA

A favor:

– Buen acabado gráfico.
– Mucha originalidad.
– Explota al máximo las posibilidades de Nintendo DS en cuanto a jugabilidad.
– Argumento muy interesante.
– Puzzles de todo tipo.

En contra:

– Es corto.
– Los gráficos no lucen lo que debieran debido a la cámara aérea.
– En ciertos momentos el desarrollo de la acción puede parecer algo lento.